Querido :
Hubiéramos comenzado tan bien, si no fuera una carta de adiós, una carta de resentimiento y tristeza.
No tengo mucho que decir, se que en esta situación los dos fuimos culpables, pero yo culpare al destino por ponerte ahí, ahí cuando no te necesitaba, cuando creía que todo estaba solucionado, apareciste.
No mencionare que fue un error regresar, porque no lo fue, me hiciste sentir como nadie lo hizo en meses, tu lo lograstes en días, pero como no podía dejarme llevar si me tomaste en baja guardia.
Recordare siempre tu sonrisa, yo me sonrojaba pero tu seguías viéndome, miraba tu mirada en mi, ojala las cosas fueran tan diferentes, si pudiera sacar algo de esto seria eso, el sentimiento de estar protegida contigo. Pero lo destruiste, no se como pero lo hicisteis. Tres minutos y una respuesta basto.
Si en algún momento lees esto, si me lastimaste, me dijiste que no era tu intención hacerlo, pero lo hiciste, ojala alguien pudiera venir y hacer que todo cambiara, pudiera amarlo y tu te morirías de celos, pero no lo harías, porque nunca te importe demasiado, porque nunca fui la primera.
Me despediré como comenzamos, con ilusiones, con la ilusión que no le hagas daño a nadie otra ves, con la ilusión de olvidarte, con la ilusión de amar otra vez.
Ps: No volveremos a ver...
